Se me presenta un año de propósitos, en el que viviré las mejores experiencias de "mi juventud".
Ya pasó el ángel negro del falso amor, ahora toca relajarse y pensar en disfrutar al máximo de todas las vivencias posibles.
¿Qué tiene que ser con mis amigos?, ¿Qué tiene que ser con mi familia? u otros que pasen por mi vida de paso...
No importa, lo que tenga que suceder, pasará. Seguramente no sea consciente de las personas nuevas que voy a conocer y que hasta ahora no sabía de su existencia y puede que el hecho de conocerlas suponga un gran cambio en mi visión de la vida. Puede que me aporten muchos valores.
Puede que si o puede que no.
Podré viajar y conocer Boston, New York, uno de mis sueños.
Podré realizar una escapada con amigos a la playa por fin de curso, uno de mis sueños desde que era bien pequeña.
Rock in Rio será un buen regalo de cumpleaños, 17 años ya...
Parece mentira, hace nada era una canija, añoro esos momentos y aunque los viví al máximo, me da mucha lástima crecer, y ver como se pasa el tiempo de rápido.
Habrá que hacer que el momento que vivamos sea único.
¿Cómo lo hacemos?
Siendo nosotros mismos, no dejar que los demás tapen nuestro potencial y lo más importante nuestra personalidad. Esa que nos define, porque nosotros forjamos nuestra personalidad con las decisiones que vamos tomando.
No seamos del rebaño, seamos esa oveja negra, pero no viéndola desde el punto negativo, sino como la oveja independiente, aquella que por ser diferente del resto es especial.
Sé tu mismo y triunfarás en tu vida social, personal, profesional...
Y adopta una amplia y sincera sonrisa.
